sábado, 3 de abril de 2010

CARTA A UN FANTASMA....


DULCES SUEÑOS....


Mi Amado Fantasma:


Recuerdas cómo nos conocimos?. Fue una vez, en un sueño, como pasaba en los cuentos de hadas, príncipes y princesas que me contaban de niña y siempre, siempre tenían un final feliz.

Esa noche salíamos de cena, era una cálida noche de invierno y llovía incansablemente, las lágrimas cegaban el cristal de tu coche. Tu inesperado beso cegó mi sensatez. Fue un beso robado, robado al destino, un beso inocente, un beso pensado a la nada. Una “nada” que se prolongó en inextinguibles y maravillosos sueños.

Cada noche despertaba a mi realidad, anhelando el momento del alba para comenzar a soñar....soñar con una quimera, soñar con un imposible, soñar con esa nada, soñar contigo mi Amado Fantasma

Deseaba soñar, más que nada en este mundo, era en esos momentos, con mi infiel y cómplice Morfeo, en los que la vida comenzaba, comenzaba para mi, comenzaba a vivir. En esos momentos de ingenua ilusión nos volvíamos a encontrar, libres para compartir ideales, libres para compartir inquietudes, libres para compartir sentimientos, sentimientos cada vez mas profundos, cada vez mas sinceros, cada vez mas y mas tiernos.

Recuerdas cómo nos conocimos? Fue una vez, en un sueño. Desde entonces no he dejado de soñarte, llamarte, de buscarte y gritarte al viento, en vano, siempre desapareces en la claridad de la noche, te desvaneces para vivir tu propio sueño. Sueño compartido.... Sueño hendido.

Cómo retenerte en los míos cuando ni aún los tuyos te pertenecen? . Sería torpe, egoísta, egoísta e ingrato.

Una estrella despistada del camino quiso que nuestras ilusiones coincidieran. Sorpresas de la Diosa Fortuna, caprichos de Fábula insensata, onírica invención del corazón adormecido.

Lo recuerdas? Fue una noche de ensueño. El azar quiso que tus ya apagados besos rozaran mis dulces labios, que tu incandescente llama prendiera mi amarga chispa, el azar quiso que nuestros inconexos sueños desembocaran, unidos ya por siempre, a un incontrolable e innombrable delirio. Fue una noche de ensueño que nos despertó. Fue esa noche de ensueño que nos indultó....

De pronto desperté agitada, aturdida, asustada, mi Fantasma, mi Dulce Sueño se desvanecía al alba, un día mas desperté. Pero esta vez algo me decía que no te volverías a aparecer, esta vez comprendí que Tú, mi Amado Fantasma volvías, indefectiblemente, al onírico mundo al que pertenecías, al mundo de los sueños imposibles, sueños compartidos....sueños hendidos....

Desde entonces, mi Querido, mi Amado, mi anhelado Fantasma, solo tú habitas mis más íntimos sueños sin yo poder, sin pretender siquiera acariciar levemente los tuyos.

Dulces sueños, Amado Fantasma. Dulces y lindos sueños de tu propia vida, vida ya compartida con los míos.

Ahora dime, Amado Fantasma: Recuerdas cómo nos conocimos?....Dime si fue una vez, en un sueño....

5 comentarios:

  1. Todos tendríamos que tener nuestro propio fantasma, soñar es muy necesario y solo los fantasmas nos transportan a ese mundo a veces quimérico, pero siempre ilusionante.

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  2. Eso mismo pienso yo, Angel, nada mejor que tener nuestro Fantasma para seguir soñando y mantener nuestra Ilusión día a día, que si la vida es difícil, con esperanzas y un sueño por cumplir, siempre es más llevadera.

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  3. Me ha gustado tu relato bastante. Una mezcla de poesía y prosa.
    No es un fantasma, es una ilusión, una locura.
    Gracias por escribir lo que a mi me ha pasado y me pasa todavía.
    Un beso.

    Perdona por no decirte quien soy, mejor así.

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  4. Me alegro que te haya gustado, "anónimo"....a veces hay que cambiar de tercio y dejar a un lado la política, que la vida es un regalo demasiado precioso para dejar de vivirla :)

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  5. mi conclusion al ver este blog es que gonzalez pons alias anonimo se beneficia a la bloguera

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